Sillas de playa
Sillas reclinables
Una silla reclinable puede ser una muy buena inversión cuando tienes et bebé recién nacido. Puede ser agradable tener et lugar donde puedas poner a tu bebé, mientras solo necesitas cinco minutos en los que necesitas usar ambas manos. Pero, ¿conoces las reglas para el uso de una silla reclinable y cómo y cuándo es mejor comenzar a usar una silla reclinable para tu hijo? MammaShop te ayuda con buenos consejos sobre el uso de la silla reclinable.
Buenos consejos para el uso de la silla reclinable para bebés
Desde que tu hijo tiene cinco a ocho semanas de edad, puede sentarse en una silla reclinable. Si es cuando el niño tiene cinco u ocho semanas depende de cuán rígido esté tu bebé en la espalda. Si tu hijo está rígido en la espalda, no hay problema en que ya pueda usar una silla reclinable desde que solo tiene cinco semanas. Si, por otro lado, tu hijo es más flojo, deberías esperar un poco más. Después de las ocho semanas, todos los bebés podrán utilizar una silla reclinable, a menos que tu hijo tenga problemas de espalda de algún tipo. Aquí siempre deberías consultar con un experto para estar en el lado seguro.
Cuando comiences a poner a tu hijo en la silla reclinable, es importante que solo sea por poco tiempo a la vez, alrededor de cinco a diez minutos, para que la espalda no se vea sobrecargada. Después de un tiempo, sin embargo, puedes comenzar a aumentar lentamente la duración del tiempo en la silla reclinable. Desde que tu hijo pueda sentarse por sí mismo, ya no es una buena idea tenerlo en una silla reclinable, ya que es mejor que él/ella pueda moverse por el suelo.